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Hoy os contamos la receta de la leche frita, un dulce muy consumido en Cuaresma y que no deja indiferente a nadie.
Origen de la receta de la leche frita
La leche frita es un postre típico de la gastronomía española, pero su origen es incierto. Algunos aseguran que proviene de la Edad Media, mientras que otros la relacionan con la cocina árabe. Lo que sí es cierto es que su popularidad se extendió por toda España a partir del siglo XIX, y hoy en día se consume en muchas regiones del país. Además, su nombre puede resultar un tanto engañoso, ya que en realidad no se fríe la leche, sino la masa que se obtiene a partir de ella.
La leche frita es un postre muy versátil que se puede acompañar con diferentes ingredientes, como miel, mermelada, chocolate o frutas. Además, es una receta fácil y económica que se prepara con ingredientes sencillos que se suelen tener en casa. Otra curiosidad es que, aunque su origen no está del todo claro, sí se sabe que era uno de los dulces favoritos de los reyes españoles en la Edad Media.
En la actualidad, la leche frita es un postre que se consume en toda España, aunque su preparación y presentación pueden variar según la región. Por ejemplo, en algunas zonas se le añade un toque de limón a la masa para darle un sabor más fresco, mientras que en otras se utiliza canela en rama en lugar de canela en polvo. También hay quienes prefieren servirla con un toque de licor, como el brandy o el coñac.
Ingredientes de la leche frita
A continuación, os describimos los ingredientes necesarios para la elaboración de la leche frita, aproximadamente para 4 personas.
Ingredientes:
- 1 litro de leche entera
- 150 gramos de azúcar
- 100 gramos de maicena (harina de maíz)
- 4 huevos
- Canela en polvo
- Aceite de oliva suave
- Harina y huevo batido para rebozar
- Azúcar glas para decorar
Elaboración de este postre de Cuaresma
- En una olla, calentar la leche junto con el azúcar y la canela. Dejar infusionar a fuego lento durante unos 10 minutos.
- En otro recipiente, mezclar la maicena con los huevos previamente batidos. Añadir poco a poco la leche infusionada y mezclar hasta obtener una crema homogénea.
- Volver a verter la mezcla en la olla y cocinar a fuego medio, removiendo constantemente con una cuchara de madera, hasta que la crema se despegue de las paredes y el fondo de la olla. Este proceso puede tardar entre 15 y 20 minutos.
- Verter la crema en una fuente rectangular previamente engrasada con aceite de oliva suave y dejar enfriar en el frigorífico durante al menos 2 horas.
- Una vez fría, desmoldar la masa y cortar en porciones del tamaño deseado.
- Rebozar cada porción en huevo batido y harina y freír en aceite de oliva suave caliente hasta que estén doradas.
- Escurrir el exceso de aceite sobre papel absorbente y servir caliente espolvoreado con azúcar glas.
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