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¿Qué significa la Ascensión de Jesús?
La Ascensión de Jesús es vista como la culminación de su ministerio terrenal y el cumplimiento de las profecías mesiánicas. Jesús, después de resucitar de entre los muertos, permaneció cuarenta días en la tierra, enseñando a sus discípulos y fortaleciendo su fe. Luego, en el cuadragésimo día después del Domingo de Resurrección, ascendió al cielo delante de sus seguidores, dejando una promesa de retorno.
Ascensión de Jesús
Origen de la festividad de la Ascensión
La festividad conocida como la Ascensión del Señor es de gran antigüedad. Aunque no hay pruebas documentales de su existencia antes del siglo V, San Agustín de Hipona afirmó su origen apostólico y la describió como una celebración universal en la Iglesia desde tiempos anteriores a los suyos.
Además, hay numerosas menciones en los escritos de San Juan Crisóstomo, San Gregorio de Nisa y en las Constituciones apostólicas del siglo IV. La peregrinación de Egeria hace referencia a la vigilia de esta festividad y a la celebración en sí, como se conserva en la iglesia construida sobre la gruta de Belén. Es posible que antes del siglo V, el evento narrado en los evangelios se conmemorara junto con la solemnidad de la Pascua o de Pentecostés.
También se sugiere que el controvertido Decreto 43 del Concilio de Elvira (Circa 300), que condenaba la práctica de celebrar una fiesta en el cuadragésimo día después de la Pascua y que omitía la celebración de Pentecostés en el quincuagésimo día, podría implicar que la Ascensión se conmemoraba junto con Pentecostés. Se encuentran representaciones de este misterio en dípticos y frescos que datan incluso del siglo V.
Significado
La ascensión de Jesucristo tiene significado por diversas razones:
- Marca el fin de Su ministerio terrenal. Dios Padre amorosamente envió a Su Hijo al mundo en Belén, y ahora el Hijo regresa al Padre. Su tiempo limitado en forma humana ha concluido.
- Representa el éxito de Su obra en la tierra. Jesús cumplió todo lo que se esperaba de Él.
- Simboliza Su regreso a la gloria celestial. La gloria de Jesús estuvo oculta durante Su estancia en la tierra, salvo por una breve excepción en la Transfiguración (Mateo 17:1-9).
- Señala Su exaltación por parte del Padre (Efesios 1:20-23). Aquel con quien el Padre estaba sumamente complacido (Mateo 17:5) fue recibido en lo alto con honor, y se le dio un nombre sobre todo nombre (Filipenses 2:9).
- Le permite preparar un lugar para nosotros (Juan 14:2).
- Indica el comienzo de Su nuevo ministerio como Sumo Sacerdote (Hebreos 4:14-16) y Mediador de un Nuevo Pacto (Hebreos 9:15).
- Establece el patrón para Su retorno. Cuando Jesús regrese para establecer Su Reino, lo hará de la misma manera en que se fue: literal, corporal y visible en las nubes (Hechos 1:11; Daniel 7:13-14; Mateo 24:30 y Apocalipsis 1:7).
En conclusión, la Ascensión de Jesucristo es un evento de profundo significado teológico y espiritual para los creyentes cristianos. Marca el fin de Su ministerio terrenal, el éxito de Su obra redentora, y Su glorioso regreso al Padre. Esta celebración no solo nos recuerda la exaltación y la autoridad de Cristo, sino que también nos brinda esperanza en Su promesa de regresar en gloria para establecer Su Reino. La Ascensión no solo señala el cumplimiento de las profecías, sino que también nos llama a vivir con la expectativa de Su retorno y a continuar Su obra en el mundo.
