Historia de la Hermandad del Lavatorio
La historia de la Hermandad del Lavatorio se remonta al 30 de marzo de 1739. Como ocurrió con otras cofradías egabrenses, se fundó en el seno de la Cofradía de la Aurora. Los orígenes de esta hermandad se deben a un movimiento de cambio que introdujo Don José Ximenez de Valenzuela.
El 30 de marzo de 1739 se firma la escritura de ereccción de la Hermandad del Lavatorio. Este acto tuvo lugar ante el escribano egabrense Plácido García Montero. Esta nueva cofradía se inscribía dentro de la Cofradía de Nuestra Señora de la Aurora. Durante los primeros años la hermandad procesionó el Miércoles Santo.
En la escritura de la fundación de la hermandad se especifica que las imágenes siempre serían propiedad de las familias Ubalde y Bladero, a menos que los herederos renunciacen a estas. En dichos documentos se constató que la familia cedería las imágenes para el desfile procesional. La primitiva imagen de Jesús de la Humildad no es la misma que en la actualidad. Las características de la primitiva imagen eran muy similares a las de Jesús de la Oración en el Huerto o la Santa Cena que Josep Ximenez de Valenzuela había hecho años atrás. Sin embargo, las características de San Pedro muestran que son de otro autor.
En el año 1778 las imágenes pasaron a ser propiedad de la Hermandad de la Vera+Cruz. Por lo que la Hermandad pasó a procesionar en el Jueves Santo, día en el que estuvo procesionando hasta el año 1951. A partir de ese año la hermandad entró en una serie de problemas económicos. Durante la primera mitad del siglo XX la continuidad de la cofradía dependió de la familia Chacón Castillo.
Refundación
El 5 de mayo de 1980 un grupo de jóvenes de la localidad deciden refundar la Hermandad ya que habían encontrado unas antiguas imágenes en la Iglesia de San Juan Bautista del Cerro.
La primera salida procesional de la hermandad, tras su refundación, se produjo el 16 de abril de 1981, concretamente desde un garaje de la localidad debido a la negativa eclesiástica para hacerlo desde algún templo de nuestra localidad.
La imagen que podemos ver en la fotografía anterior se corresponde con la primera salida procesional tras la refundación. Esta salida procesional se produjo desde un garaje, la música era un equipo de música con un cassete, y una túnica de Jesús Preso. Respecto al paso podemos decir que la hermandad se lo compró a la Hermandad de las Necesidades, y esta a su vez se lo compró a la Hermandad de Montserrat de Sevilla, la Hermandad salió a ruedas. Debido al mal estado del paso la hermandad decidió dejar de procesionar con ese y pasar a hacerlo al año siguiente con el trono de la Hermandad del Santo Sepulcro.
En el año 1986 llegaría una de las primeras innovaciones en el seno de la hermandad, la imagen titular sería sustituida por una nueva. La antigua imagen titular pasaría a procesionarse como Santiago Apostol.
Titulares de la Hermandad del Lavatorio
Ntro. Padre Jesús de la Humildad en el Lavatorio a sus discípulos
La imagen del Señor de la Humildad es una obra del escultor sevillano Manuel Escamilla Barba del año 1986.
Representa a Jesús ligeramente inclinado en posición de lavar los pies a San Pedro. La imagen tiene un gesto natural pero un poco forzado, ojos grandes y cejas espesas. El bigote y la barba están más labrados, formando mechones de poca profundidad. Sin embargo, la barba fue ejecutada de forma simétrica, pese a caer luego de forma ondulada encontrando guedejas de colocación variada. La imagen tiene las manos abiertas, haciendo el gesto de sujetar una tejido en las manos para secar los pies a los discípulos.
Virgen del Amor Fraterno
En la década de los años 80, la Hermandad comienza a rendir homenaje a la imagen de María bajo la advocación del Amor Fraterno. Fue en el año 1991 cuando la Cofradía adquiere la actual Titular Mariana, una obra creada por Manuel Escamilla y Juan Ventura. Esta figura es conocida por ser una de las representaciones más tiernas y juveniles de una Virgen dolorosa creada por Escamilla. Sus cejas son horizontales y sus ojos grandes tienen una mirada muy dulce. Su nariz es recta, con aletas recogidas, y tiene una pequeña abertura en los labios. Su frente es amplia y su rostro tiene una forma ovalada afilada, acentuada por un largo y fino cuello. Las manos de la imagen son muy detalladas y expresivas. La policromía de la imagen presenta tonos rosados, más intensos en los párpados, y no tiene un brillo excesivo. Las cejas están claramente definidas sobre la piel. La expresión de la figura es tan delicada y natural que, si no fuera por las lágrimas que corren por sus mejillas, parecería que la efigie no está llorando.
Paso de misterio de la Hermandad del Lavatorio
El misterio representa el momento en el que Jesús, durante la última cena, realiza el acto de lavar los pies de sus Discípulos. En esta escena, observamos a Jesús inclinándose con una toalla ceñida a la cintura, dispuesto a lavar los pies de Pedro, quien se muestra sorprendido por el gesto de su Maestro. Junto a Pedro, se encuentra Juan, quien se siente contrariado y se está descalzando. Santiago, en pie junto a la columna del Cenáculo y detrás de Jesús, muestra asombro ante el humilde gesto, mientras que Judas, en el fondo, parece estar a punto de marcharse con la bolsa que contiene las 30 monedas de plata que recibió a cambio de su traición.
La representación original de este misterio solo incluía a Jesús y San Pedro. Sin embargo, en una etapa posterior de reorganización, la Hermandad decidió enriquecer la escena añadiendo las figuras de Santiago, San Juan y Judas.
La figura del Apóstol Santiago fue creada por Manuel Escamilla y Juan Ventura en 1991, mientras que las representaciones de Judas y San Juan fueron modeladas y talladas por José María Leal junto a Manuel Escamilla en 2008. El misterio se completa con la imagen de San Pedro, que es anónima pero se atribuye a Ximénez de Valenzuela y data de mediados de la primera mitad del siglo XVIII, coincidiendo con la fundación de la Hermandad.
